Íbamos a estar 22 días fuera de casa, en un país sin la Seguridad Social española, con niña y en el vasto mundo hotelero de Punta Cana y Bayahíbe. Por lo que no podíamos conformarnos con lo bueno o notable, debíamos optar por lo sobresaliente para reducir al máximo el porcentaje de lo que puede salir mal. Topamos con Dominicana Tours que, atendiendo a su nombre, promete experiencia y precios de derribo para visitar el país dominicano. Una promesa con la que cumplió sobradamente, sin olvidar que también se encargan de una atención y mimo inusuales en portales y agencias digitales.
Por cifrar dicha atención, recontamos hasta 10 correos electrónicos y 4 llamadas en las que, día tras día (los precios son cambiantes en cuestión de horas, ley de oferta y demanda) nuestro agente nos descolgaba inmediatamente (primer punto), derrochaba amabilidad (desde la primera a la décima ocasión), asesoraba y nos ponía sobre la mesa pros y contras de uno y otro vuelo, uno y otro alojamiento (punto y bonus). Sí, fuimos extremadamente pesados, pero queríamos que todo saliera bien. Incluso en la adversidad. Por eso valoramos tan positivamente su grado superlativo de conocimiento de los destinos (en nuestro caso, Bayahíbe y Punta Cana), la pasión viajera al describir la experiencia y una formación mayúscula, al integrar las bondades de cada alojamiento o destino al perfil y necesidades del consumidor. Así fue como supimos que viajábamos en época de sargazo (algas) a Punta Cana pero que, sin embargo, en Bayahíbe nos daría un respiro. Sólo con su orientación tuvimos una planificación perfecta de nuestros días sin caer en la reiteración, exprimiendo al máximo complejo hotelero y destinos.
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| La interfaz es sencilla y las ofertas vistosas. Cambian en cuestión de horas, ¡date prisa! |
Pero sobre el papel y de manera previa todos funcionan bien, o deberían. El valor añadido aparece cuando vienen mal dadas. Una tos algo sospechosa en tiempos de COVID nos hizo temer lo peor en nuestra pequeña, y así se lo hicimos saber al seguro. Tras un par de horas aún no habían contestado, así que se lo trasladamos a Dominicana Tours. En unos minutos nos habían respondido ellos al correo y, acto seguido, lo hizo el seguro trasladando todo tipo de facilidades. Luego todo quedó en el susto y los síntomas desaparecieron enseguida pero no la atención; hicieron seguimiento en un par de ocasiones más para cerciorarse de que todo iba bien.
Incluso a la vuelta se interesaron por nuestra experiencia en los hoteles y la aerolínea contratada; no quieren dormirse en los laureles, ni confiar sólo en su experiencia, sino recabar información de la tuya para afinar y actualizar lo máximo posible todos los datos y, en su caso, buscar fórmulas de mejora con los proveedores e incluso nuevas fórmulas.
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| Lejos de dormirse en los laureles, Dominicana Tours añade constantemente destinos y propuestas. Una oportunidad para revisitar lo que crees conocer. |
Tan arriesgado es poner en tu nombre corporativo un gentilicio que promete buen hacer sobre el destino como difícil estar a la altura de la expectativa. Dominicana Tours lo estuvo por precio (1700 euros 2 adultos 1 niña la primera semana, el resto lo contratamos por separado porque el pack vuelo+hotel suele ser de una semana), calidad pero, sobre todo, asesoramiento, seguimiento y conocimiento. Deseando comprobar que estas cualidades no se detienen en República Dominicana sino que se aplican al resto de destinos nacionales e internacionales que trabajan.
Más información en https://www.dominicanatours.com/
*Y si quieres saber cómo nos fue en República Dominicana no te pierdas:
Mejores hoteles República Dominicana II: Lo que venías buscando a Punta Cana
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Jesús Clemente Rubio