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Ginkgo Jet Drunk o visitar Brasil, Cuba y México cóctel en mano



Hay una expresión muy castellana que comienza con un "no sabes qué hacer para..." que podríamos completar, por ejemplo, con "para llenar de gente tu local". Algo que persigue cualquier establecimiento dirigido al ocio y disfrute, también Ginkgo Sky Bar. La diferencia con la terraza del hotel VP Plaza de España es que ellos sí saben qué pasos hay que dar para registrar llenazos fin de semana tras fin de semana, que parte de una premisa sencilla: innovar. Optar por la constante actualización ya sea de carta o, como el caso que nos ocupa, de shows maridados con coctelería casera casi desde el primer ingrediente. Ginkgo Sky Bar da una vuelta de tuerca más a este "combinado" con Ginkgo Jet Drunk, un viaje con talentosa tripulación y a través de cócteles que exploran las idiosincrasias brasileña, cubana y mexicana. Una nueva excusa para volver a una de las azoteas referentes de la capital.
Si bien en Instagram os dejamos un pequeño aperitivo de lo que da de sí el show, veréis que tanto allí como en esta reseña no destriparemos demasiado contenido visual para no arruinaros la experiencia. En cambio sacaremos músculo gastronómico porque, si bien tu tarjeta de embarque que te da acceso al show -así son de originales- posee tres pestañas con otros tantos cócteles, también puedes subirte al Jet Drunk con una cena previa, que se solapa levemente con el espectáculo, donde calentar motores con agua, refrescos, vinos y cerveza. No es el grueso de la experiencia pero siempre cabe recordar deliciosos entrantes como la ensaladilla rusa, las gyozas y las croquetas, principales de altura como los chipirones o la pluma marinada y un cierre para el recuerdo en forma de tarta de queso.



Si quieres completar tu viaje, la excelente carta de Ginkgo te espera.

Precisamente hincando el diente al postre fue cuando hizo acto de presencia uno de los "tripulantes" de cabina para, tras darnos las debidas instrucciones, invitarnos a subir a un Jet Drunk con México como primera parada, donde un poco de folclore, canciones pinchadas y también en directo (porque siiiigo sieeeendo el reeeey) y algún que otro baile nos sumergen en el país norteamericano con una mezcla de espectáculo, humor, danza y una buena dosis de talento. Descuida, tendrás tiempo para la salsa y la samba, la lucha mexicana y el carnaval brasileño... todo en una sola noche.


Un viaje por el mundo sin moverte de Ginkgo y cóctel en mano. Fuente: Gingko Sky Bar.

Para rematar el grado de inmersión, cada viaje tiene un cóctel asociado si bien siempre puedes salirte de ellos y explorar el resto de las veintiuna referencias paridas entre los dos Ginkgo, Sky Bar y Garden, este último el "laboratorio". 

La coctelería de Ginkgo Sky Bar es un festival de sabores y colores.

Puedes leer más sobre ellos en nuestra reseña sobre la masterclass que tuvimos el honor de recibir del cerebro de todo esto, Jorge Barra, que lleva a la ejecución y preparación la enorme pasión que siente y transmite por la coctelería. Así, número tras número, cóctel tras cóctel, completamos una velada en la que cuando descansan los actores no lo hace la música ni la estupenda ambientación que invita a charlar y conocer, a desconectar y disfrutar... a vivir, que para eso estamos aquí. Todos los viernes y sábados hasta septiembre.

Más información en https://www.ginkgoskybarmadrid.com/#ginkgo-jet-drunk

Jesús Clemente Rubio