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El show más Wahpo de Madrid







 

Wah! es una fusión de experiencias en las que, por separado, buen justificarían también tu entrada para disfrutar de un espacio instagrameable con comida de altura, un concierto repasando grandes clásicos desde todos los géneros o bien una discoteca con música y DJ en vivo en un ambiente sano, festivo y tremendamente divertido. Cada uno brilla con luz propia pero juntos te hacen imposible no caer rendido a alguno de los 3 actos que componen 5 horas de embriagador entretenimiento. Habías oído hablar de él, cada vez que te dejabas caer por IFEMA lo veías anunciado o bien una interminable cola de gente agolpada esperando entrar puntual al primer acto y ahora nosotros hemos corroborado todo de primera mano asistiendo a un espectáculo que ha superado toda expectativa. Wah!

Salvar la música de una prohibición que convertiría la vida, como decía Nietzsche, en un tremendo error. Es la premisa de la que parte el espacio ubicado en el lateral del pabellón 5 de IFEMA (se accede por fuera) y de la que te empapas en el llamado acto 0, que llega a tu móvil una vez completas la reserva. A partir de ahí comienza una experiencia que de manera puntual abre sus puertas para recorrer espacios muy instagrameables (incluso te chivan mediante pegatinas en el suelo dónde colocarte para obtener el mejor ángulo) y que obedecen en ornamentación a la comida que ofrecen en cada rincón. Decoración asiática para baos y sushi, atmósfera de food trucks para la estadounidense y mexicana... y lo más sorprendente es la calidad de cada bocado. En nuestro caso la hamburguesa, queso flameado mediante, resultó casi tan sabrosa como una solvente tabla de sushi o un delicioso bao de rabo de toro. Un par de platos por cabeza darán cuenta de tu buche al margen de la bebida por la que apuestes... y que podrás seguir degustando, en el caso de esta última, ya en tu mesa. Tranquilo, que aunque hablamos de hora y media dando vueltas, ahciendo fotogra´fias y comiendo, no se te harán largas gracias también a la puntual y breve animación en forma de coreografías que te encontrarás en determinados puntos y momentos de este primer acto. Concluido, empieza el plato fuerte: tras un breve sorteo arranca un concierto que por variedad de números y géneros, puesta en escena y calidad de ejecución y canto no sólo no envidiará a otro al que hayas asistido, sino que sacará los colores a muchos, muchísimos otros espectáculos musicales en los que hayas estado. Tocan con maestría todos los palos, desde el heavy al flamenco, del pop al dance, y lo hacen con un elenco de extraordinario talento. Os hablaríamos uno por uno y acabaríamos con adjetivos que ensalzasen su labor, pero preferimos dejarlo a vuestro juicio para así no destripar nada.


El propio elenco te conduce hacia el tercer acto, un pedazo del espacio recorrido en el primer acto y reservado para el baile mientras que una pasarela que gana terreno a la pista hace desfilar a algunos de los artistas que hemos visto anteriormente para, esta vez saltando y bailando, corear las canciones con las que nos premian... al margen de lo que pinche un DJ que sabe perfectamente dosificar, medir tiempos y mezclar géneros para mantener al público enganchado.


¡Qué guapo, guapísimo! oímos una y otra vez, entre algarabía, color, globos, confeti y todo elemento que puedas imaginar para una fiesta sublime. Y lo certificamos: un espectáculo Wah!písimo que tenemos la fortuna de saborear en todas sus vertientes en la capital. De las experiencias que más enérgicamente y con mayor convencimiento recomendamos de cuantas hemos escrito en estas líneas.

Más información en https://wahshow.com/