Es difícil entender a los que aún no han caído en las redes del servicio Game Pass de XBOX. Ya no por las constantes ofertas de un trimestre a 1 euro, entre otras muchas... tampoco por el impresionante catálogo de videojuegos que despliega y alberga, sino por las constantes novedades que, lejos de traicionar el espíritu y producto inicial, sigue dotándolo de una calidad sin precedentes con cada lanzamiento. It Takes Two lo mencionamos por encima en anteriores reseñas sobre Game Pass, ahora tenemos que recomendarlo encarecidamente tras jugarlo y completarlo de manera cooperativa. Lo que sí acaba de aterrizar y es menester jugar es Inside, la joya de los creadores de Limbo, y As Dusk Falls, una película interactiva superior a muchas de las que engullimos en las actuales plataformas audiovisuales digitales. Y con una banda sonora para enmarcar, todo sea dicho.
Una excelente película con dosis de interacción
As Dusk Falls es una aventura narrativa interactiva que debería estar en la estantería de todo jugador. Y nos atrevemos a afirmar tan categóricamente por un doblaje al castellano exquisito, una dinámica sencilla (algunos eventos de pulsación de botones para completar acciones y muchas decisiones que siempre tienen consecuencias) y un excelente argumento en el que cada elección y resultado de la misma encaja en los diversos relatos que podemos tejer. Una familia que cambia de aires se cruza con otra en serios aprietos empujados a cometer un robo que sale mal. A partir de ahí se teje una amalgama de historias personales, a priori, que luego acaban confluyendo en tramas comunes. Todo ello con una llamativa puesta en escena entre dibujos realistas y sucesión de imágenes fijas y una banda sonora SUBLIME. Castigo o perdón, venganza u olvido, redención... valores que destacarán más o menos en función de lo que elijas en la piel de uno de los tres protagonistas del juego, si bien en algún momento tocará decidir por otros secundarios cuyas consecuencias no serán baladí precisamente. En definitiva, la película del verano no está en Netflix ni HBO, sino incluida en Xbox Game Pass y se llama As Dusk Falls.
 |
| En Inside asistimos a una oscura trama en la que una organización priva de toda conciencia al ser humano. |
Inside, un Limbo en color pero más oscuro
Si Playdead cautivó al mundo del entretenimiento tecnológico con Limbo, en Inside se superan. Lo hacen por un comienzo que, al igual que aquel, nos llega sin cabecera ni previa alguna situándonos ya en una acción que parte de una sencilla premisa y dos botones para avanzar en una oscura trama. Somos un niño que escapa de adultos trajeados que capturan -quizá, mortalmente- a las personas para hacer de ellas una suerte de red neuronal sumisa a las órdenes de quien se enfunde un aparato en la cabeza con el que darlas órdenes. Una tecnología que nos valdrá en muchos momentos para poder avanzar en los escenarios y resolver puzzles o levantar puertas que, por sí mismo, el protagonista nunca podría. Ingeniosos rompecabezas y la constante gratificación de irlos completando favorecen una adictiva jugabilidad que siempre invita -casi obliga- a completar una pantalla más. Y si no es la jugabilidad, lo hará la trama, que vamos descubriendo hasta un final -y otro alternativo- surrealista y catártico abierto a interpretaciones. Date un respiro de superproducciones y juegos de primera línea: Playdead vuelve a demostrar que los independientes como Inside son cruciales para cualquier jugador.
 |
| Cody y May serán muñecos hasta que vuelvan a entenderse. |
It Takes Two para que triunfe el amor
Así es, si dos no discuten si no uno no quiere, tampoco una relación sale adelante si ambos no están por la labor. Y tampoco podrás completar It Takes Two sin un compañero en cooperativo local o en línea que esté dispuesto a atravesar en pareja este mundo de acción y plataformas. El argumento es genial, partiendo de un matrimonio a punto de romperse que, de repente, se ve obligado a entenderse aunque sea por última vez al ser convertidos en muñecos tras un fuerte deseo de reconciliación de su hija Rose. Por mucho que les pese, Cody y May afrontan un nuevo mundo mágico plagado de desafíos insuperables si no logran acercar posturas y cooperar. Una excelente manera de recordar al jugador que, tratándose de un juego de cooperación, nada podrá hacer si no atiende y se entiende a las necesidades y demandas del que sujeta el otro mando de control. La idea encuentra también una ejecución perfecta con variados retos y situaciones que dibujarán en ti una sonrisa al comprobar cómo se trabajan los desarrolladores los diferentes puzles para dar lugar a soluciones colectivas. Y siempre con la esperanza de que, al final del juego, llegue una reconciliación que recuerde a este matrimonio a punto de dejar de serlo por qué una vez decidieron unir sus caminos.
Jesús Clemente Rubio