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Descubrimos el origen de Gru en el Palacio de la Prensa


Ya sabéis que nos encanta el cine y, dentro de este hermoso mundo artístico, adoramos el aroma de las salas con más historia. Algunas de ellas están en el Palacio de la Prensa, donde siempre se codean con los últimos estrenos y donde tuvieron a bien proyectar en la sala 1, nuestra favorita por su envergadura y disposición, Minions: El Origen de Gru. Quizá una vuelta de tuerca más en busca de exprimir la gallina de los huevos de oro pero, hay que reconocerlo, esta película posee aquello de lo que carecía Minions: nuestro villano favorito. 

Porque aunque sea en versión infante, las travesuras -que no maldad- de Gru nos enganchan desde el primer plano. Y a partir de ahí, la película sabe tejer perfectamente los villanos de verdad, el origen de Gru a través de todo padrino que poseen los más grandes y, por qué no, el paso de servilismo e interés a  la amistad. Por el camino, unos Minions que siempre te arrancan una sonrisa -carcajada en el caso de nuestra pequeña- y que se convierten en los necesarios compañeros de la figura principal, Gru. Es quizá el camino que ha de seguir la franquicia, el de colocar siempre como eje de la trama a Gru y de manera coral a unos esbirros que todo lo ensalzan: drama, humor, acción...

Sobre la sinopsis, aunque ya uno la puede anticipar con lo escrito hasta ahora, os diremos que parte del deseo de Gru, en contra de todos sus compañeros de clase, de ser un gran villano al estilo de los Salvajes 6. Pronto se percatará de que los Salvajes 6 no son la pandilla unida que él creía y será uno de ellos el que le guíe en sus primeros pasos en su carrera. Y el que le ayudará a percatarse de que los Minions son mucho más importantes en su vida de lo que él cree.


Más información en https://palaciodelaprensa.com/espectaculo/minions-el-origen-de-gru/minionsorigengru


Jesús Clemente Rubio