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El Museo de las Ilusiones, justo lo que necesitábamos

En una época de grises y como mucho claroscuros, una etapa que, si bien cuando pase veremos pequeña y minúscula, ahora vemos un mundo. En tiempos de COVID19 y nueva normalidad, necesitabámos alegrías y entretenimiento. Así lo corrobora el Museo de las Ilusiones, del que ya os avanzamos algo, y que ahora amplía fechas y horarios debido al éxito cosechado. Ilusionante cultura.

 Cuando llegamos vemos cola. Celebramos por dentro que la cultura y el entretenimiento se reactiven, y que lo hagan con medidas de seguridad que desde dicha espera ya son más que evidentes pero, una vez dentro, se maximizan con personal desinfectando tras cada interacción del visitante. ¿Interacción? Sí. Como alguna vez os hablamos a propósito de los Ripley´s Believe it or Not! de Nueva York y Dublín, no hay mejor museo que el que sumerja al visitante a través de diversos grados de interacciones.

Aquí los tienes todos gracias a diversos efectos visuales y curiosidades de la Física. Espejos que no devuelven exactamente la imagen original en su reflejo, trampas visuales en las que cae y vuelve a caer nuestro cerebro, cabezas flotantes, una pila de Einsteins mirándonos allá donde vayamos pero, curiosamente, el visitante que camina dos metros tras de ti dirá que es a él a quien miran... Son muchísimas las ilusiones que ofrece este museo tanto para deleite visual del visitante como también para llevarte a casa una de esas fotografías que te pondrás en el perfil a los pocos minutos.

He aquí otro de los puntos fuertes: todo el recorrido está marcado en el suelo con dos motivos diferentes. En el primero, te indican dónde colocarte para ser parte de la ilusión. En el segundo, el punto de referencia es para el fotografiado, para que la cámara recoja a la perfección el efecto óptico que se pretende. Si te quedan más dudas, descuida, siempre habrá cercano un miembro del museo para resolver cualquier duda acerca del "juego" o la fotografía.

En una hora habrás dado buena cuenta del museo, fotografías incluidas, pero si eres purista y quieres las imágenes perfectas quizá te vayas a la hora y media. Y no te preocupes por si hay aforo completo; verás como la gente, obedeciendo a todas las indicaciones, es muy respetuosa y siempre tendrás tu oportunidad de experimentar y fotografiarte con cada "estación de la ilusión". Ignoremos por un instante lo que hay fuera. Entreguémonos a la ilusión.

Precios, horarios y más información en la web del Museo de Ilusiones de Madrid.

Jesús Clemente Rubio