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Survival Zombie en La Vaguada: Sobrevivir en un centro comercial

Sobrevivimos. A duras penas. Pero lo hicimos. Y completando casi el juego, con 10 sellos en la cartilla y un sinfín de sustos, emboscadas y esprines para evitar que nos arrebatasen la única vida de la que disponíamos en el juego. La experiencia Survival Zombie en La Vaguada cumplió con las expectativas y, agobios y aglomeraciones aparte, nos quedamos con varios grandes momentos, del que rescatamos uno: el apagón del parking subterráneo... y a correr.

La organización de La Vaguada, así como el respeto de los participantes, fue impecable a partes iguales: pasillos e iluminación listos para garantizar la seguridad de los corredores en todo momento, islas recogidas como cualquier día normal que brotase un virus zombi y un súbito comienzo que bien podría pillar a alguno cargado de bolsas y elegir entre sus chollos de rebajas o su vida. Nos sorprendió que apenas transcurridos unos minutos ya devorasen a una superviviente -bueno, que dejó de serlo-, pues se trataba de una vida, pero también era sorprendente el precio de esta edición (10 euros) con lo que era normal que el millar de corredores descendieran desde el comienzo para que, finalizadas las 4 horas, quedasen pocos. Aún así sobrevivimos muchos, quizá demasiados, pero ello no empañó nuestra visión del juego -quizá sí a los actores- y, con paciencia y retorno una y otra vez hasta que la horda de turno nos lo permitiese, pudimos obtener los 10 sellos de superviviente y rellenar nuestra cartilla.

A un paso que, por supuesto, no vamos a desvelar, nos quedamos de completar el 100% del juego pero la organización tuvo a bien premiarnos a todos los que evitamos la mordida con una secuencia final que, sin grandes artificios ni helicópteros como en otras ocasiones, sí desplegó unos minutos de músculo y experiencia en este tipo de eventos. Menuda masacre. 

En el durante, os mencionábamos en la entrada, La Vaguada supo disponer muy bien a su personal de seguridad por la parte del recinto reservada para la experiencia y delimitar de manera muy visual el área efectiva de juego, de manera que nunca entorpecieron y sí ayudaron a enriquecer la experiencia. No sabemos si fue idea suya o de WRG el mejor momento de la noche, pero estando varios supervivientes buscando pistas por el aparcamiento subterráneo se le ocurrió a un ilustrado -en sentido literal, no figurado y menos peyorativo- apagar toda luz dejando apenas un escaso y obligado legalmente halo de emergencia. Imaginad que estáis buscando pistas, tensos, pendientes siempre de un zombi que jurarías haber visto a lo lejos y, de repente, ahí te quedas solo, con tus gritos y los de tus compañeros y si saber si ese muerto viviente que se antojaba lejano ahora había aprovechado la oscuridad para acercarse. Uno de los múltiples momentos que acumulamos en otra "Survival" memorable y que, gracias al espacio de La Vaguada, dio un soplo de aire fresco a lo que ya conocíamos. 

*¿Os gusta lo que leéis? Pues nos comentaron que la siguiente edición se basará en Juego de Tronos y serán los caminantes los que te cacen por las calles de Boadilla... ¿a qué esperas?



Más información en http://survivalzombie.es/survival/

Jesús Clemente Rubio