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El despacho del director: El 'escape' más frenético


Phobia Escape Room parece encerrarte en una de sus salas casi desde la llegada, con una entrada semejante a una sala de espera clínica, 'game masters' ataviados con batas y de tono sosegado y decenas de objetos que activan tus mecanismos detectivescos o, cuando menos, captan la atención cerebral. Desconocemos si la otra habitación da continuidad a esta sensación, pero desde luego la que probamos, El Despacho del Director, lo hace tanto en estética como en reto cuantitativo y cualitativo. 60 minutos casi no son suficientes para completar una sala en la que, si te aburres, te aseguramos que el problema es tuyo.

Sabéis que en toda sala de escape hay decenas de objetos, algunos marcados con la clásica cruz o letrero de "No tocar" que pueden o no tener que ver con la solución de algún enigma pero, de manipular, nada. Luego hay otros muchos en los que te sumerges y echas una buena cantidad de tiempo para terminar percatándote de que sólo eran paja que ocultaba el elemento de verdadero valor. Bien, pues en el despacho del director, lo tienes todo. TODO. Es decir, de sopetón y en el desarrollo son muchísimas las cosas que encontrarás, paja... o no, eso ya te lo dejamos a ti o a los destripadores que se afanan en cargarse la experiencia de sus lectores. Nosotros os adelantamos que son tantas las cosas por hacer -y por no hacer- que apenas tendrás tiempo para atascarte, siempre hablando desde la perspectiva de 2 personas: por lo que, en esta sala en particular, recomendamos entre 3 y 4 para que la aventura sea satisfactoria para todos. 


Por eso el despacho del director nos ha gustado tanto, porque aunque seáis 4, con un mínimo de predisposición e interés que ponga cada uno -abstenerse 'personas seta'- todos recibiréis esa recompensa psicológica de la que hablan los expertos cuando valoran este tipo de entretenimiento. Retos en general asequibles, alguna vuelta de tuerca y una novedad que no habíamos encontrado en ninguna otra sala, relacionada -por supuesto, tampoco os la diremos- con la linealidad o los caminos alternativos que se pueden seguir.

Por cierto, el Game Master, que introduce muy bien en la historia, os vigila pero no escucha, y ayudar... también os dejamos que descubráis si podéis o no recibir pistas pero, en caso afirmativo, hacednos caso y no echéis mano de ellas SIEMPRE que tengáis oportunidad... sino sólo cuando estéis verdaderamente atascados. 

Si echáis en falta la sinopsis... nos habéis dicho en anteriores reseñas que tampoco queréis conocerla para que el descubrimiento sea absoluto desde que atravesáis el umbral de las salas, así pues, obedientes nosotros, os dejamos que sea uno de los ayudantes del director el que os ponga en antecedentes sobre por qué colarse en su despacho. Y en exclusiva os decimos que Phobia Escape prepara novedades, no nos han dicho cuáles, pero si se trata de variar habitaciones... os recomendamos que os deis prisa por ir y probar una de las salas de ritmo más frenético que hemos probado.



*En su perfil de Instagram suelen publicar promociones y descuentos especiales.  Más información sobre ésta y otras salas de Phobia Escape Room en su página web.




Jesús Clemente Rubio