3 días para matar: Costner impecable y sin enseñar culo

Recuerdo alucinar siendo pequeño con películas como "Robin Hood" o "Bailando con lobos". Incluso "JFK", que puede parecer infumable para un canijo, me atrajo inexplicablemente. Miento, todo tenía un por qué, y ese por qué era el bueno de Kevin Costner. Siempre adoré a este actor, creo que Hollywood también lo hizo, hasta que un par de batacazos -liderados por la sonada o, mejor dicho, ruidosa "Waterworld"- lo relegaron a un segundo plano cinematográfico. Por eso "3 días para matar" es una de las películas que más he disfrutado en las últimas semanas, porque es una cinta con una dosis ajustada de acción, unos cuantos mililitros más de drama y el resto... el resto es Costner. En estado puro. No enseña culo, como en sus mejores películas, y sin embargo bien podría entrar en esa selecta lista, recordando por qué fue uno de los más cotizados, por qué el cine es magia. Cuando una cinta llamada al tiroteo y vertiginosas secuencias consiguen arrancarte carcajadas y alguna lágrima se debe a un buen guión -que lo tiene- pero fundamentalmente, al protagonista. El mejor Costner ha vuelto señores -ya lo hizo de manera secundaria en "El hombre de acero" y "Jack Ryan"-, con la acción por excusa y esperemos que para quedarse.

Hailee Steinfeld es Zooey, la hija enfadada
por tantos años de ausencia paternal.

Ethan Renner (Costner) es un espía internacional dispuesto a aparcar sus peligrosos quehaceres diarios por recuperar la vida familiar que una vez tuvo -aunque nunca disfrutó-: mujer, hija, hogar. Lo malo es que la vida no nos espera, sino que tenemos que adaptarnos a según venga, y cuando al fin da el paso de regresar a París con ellos un último encargo de la misteriosa Vivi -como para negarse a Amber Heard- le "invita" a retrasar su retirada unos cuantos días más. He dicho que la acción de "3 días para matar" era una excusa, que no se entienda negativamente. Más bien rebosan una escenografía y coreografía brutales ya sea en las persecuciones, los tiroteos o los mamporros. Muy en la línea de "Jack Reacher", acción con muy buen gusto que sucumbe inevitablemente ante la fuerza del drama. 

Tranquilos amantes de la acción, la hay y de muy buen gusto.

En este caso, el drama es familiar, de chico a chica, de padre a hija. No sé si será porque yo, como todo el mundo, he estado ya en alguno de esos roles o por la foto de París de fondo, pero determinadas escenas emocionan de veras. Hice un ejercicio mental y os aseguro que si eliminásemos la acción, la película seguiría valiendo su peso en oro aun con el género muy bien definido. 

Los momentos de humor son tan buenos
como el resto.

El tiempo perdido y que jamás se recupera, el centrarse en lo verdaderamente importante de la vida, las segundas oportunidades... son temas más bien manidos pero enfocados desde un realismo aplastante y hacedor de nudos de garganta. Menos mal que tenemos un respiro con un buen puñado de momentos cómicos impregnados del humor más sano, el inteligente.

No soy objetivo, e ignorante -o engañabobos- es el crítico que pretenda serlo ya que es la mayor de las incongruencias. Me declaro completamente sugestionado por el poder escénico de Costner pero, dicho esto, "3 días para matar" es una de las mejores películas de acción y drama de los últimos años. Que no, que Kevin no enseña el culo -¡y dale!- aunque le queda el traje tan bien como a aquel de "El Guardaespaldas".

otiuMMaximus

- Las conversaciones padre e hija y marido y mujer.

- Las secuencias de acción, bien dosificadas y detalladas.

- Costner está impecable.


otiuMMenester
- "3 días para matar" llega hoy a las taquillas españolas.
- El 25 de julio vendrá otra cinta de acción de Tristar: "El Protector", con Jason Statham. No te pierdas el tráiler:

Jesús Clemente Rubio