Ruido. En nuestras cabezas siempre hay ruido, exista o no realmente en el exterior. El ruido de las preocupaciones, el ruido de las obligaciones, el del vertiginoso ritmo de la urbe, el del taladro del vecino inoportuno, el ruido de las malas noticias económicas, o peor aún, políticas... ruido. Tanto que no escuchas a tu cuerpo. Te pide una escapada pero, esta vez, aderezada con el ingrediente más importante para desconectar de nuestro día a día: silencio.
Si Alicante es la playa de los madrileños, el abulense Valle del Tiétar debería ser la montaña. Con la Sierra de Gredos asomando por el horizonte, se trata de uno de los enclaves más cercanos (apenas una hora de coche) y apetecibles para cualquier familia o pareja en busca del bien más preciado y escaso de nuestra querida capital. La calma, la tranquilidad, el sosiego pueden aún luchar por engullir la comarca del Tiétar pero definitivamente un alojamiento le ha ganado la batalla al ruido, y se autodenomina Paraíso.
Las cabañas parecen parte del bosque. |
Dicho y hecho, tras dejar el vehículo en el parking y ser trasladados en coche eléctrico -amén de mantener el silencio- a tu alojamiento escogido (entre cabañas y suites, en nuestro caso la Suite Sensaciones) te detienes un minuto a observar tu acertadísimo plan para esa escapada; por todas partes naturaleza, alguna zona lúdica como columpios o minigolf perfectamente integrados en el bosque y un sinfín de árboles y rocas que, lejos de agobiarte, abrazan y encantan el lugar.
Nuestras favoritas son las suites con el jacuzzi pegado a la cristalera. |
La Comarca del Tiétar ha cumplido, las instalaciones del Paraíso con nota y ya metidos en faena, la Suite coquetea con el sobresaliente. Fachada con un espacio acristalado por el que se filtra la luz solar o bien la atractiva oscuridad, ambas visibles desde el mismo jacuzzi pegado a la entrada. Y nada de bañeras con hidromasaje ni otros pseudojacuzzis: éste lo es con mayúsculas, controladores de aire y chorros de agua e incluso cromoterapia que dota a la base de una armoniosa combinación de colores.
Jacuzzi, champán y velas
Así es la "Suite Sensaciones". |
Champán, velas, jacuzzi y silencio. Esto sí es una escapada. |
Por si todo esto fuera poco para dedicarle uno o dos días (más que suficientes), recuerda que estás cerca del Parque natural de la Sierra de Gredos y en plena comarca del Valle del Tiétar. Tienes múltiples sitios cercanos que visitar y donde practicar el senderismo y hermanarte con la naturaleza... y de todos ellos dan cuenta en recepción. Porque el precio te incluye una "miniguía", una botella de champán para que las burbujas conquisten también tu gaznate, el uso de albornoces para que vuestra salida del jacuzzi no se convierta en resfriado (con permiso de la estupenda bomba de calor) y el acceso a un generoso catálogo de películas (relativamente modernas) que poder ver cómodamente mientras te bañas.
Rompe por última vez el silencio con el hidromasaje, un buen brindis... y feliz estancia en el paraíso.
otiuMMaximus
- Deja que caiga la noche y enciende entonces las velas y el jacuzzi.
- Paseo diurno por los alrededores.
- Suites con jacuzzi pegado a la cristalera.
otiuMMenester
- ¿Dónde? El Paraíso del Tiétar, Carretera Cl-501 Km.21. La Adrada, Ávila. Tlf. 91 867 02 81. Email: www.paraiso del tietar.com / bungalows@paraisodeltietar.com
- ¿Cúando? En temporada alta toparás con más familias. Nosotros hemos estado en enero y febrero y la calma es total. En primavera y verano, sin embargo, mejor tiempo para conocer el entorno.
- ¿Cuánto? Cabañas desde 65e y Suites de 120e por noche en temporada baja.
- ¿Cómo? En coche, tomas la llamada "Carretera de los Pantanos" (M-501) hasta que se transforma en la CL-501, siempre recto y sin desvío alguno. Llegarás en poco más de una hora desde cualquier punto de Madrid.
Jesús Clemente Rubio